domingo, 10 de abril de 2011

CELAM

Cerca de medio centenar de delegados –entre obispos, sacerdotes, religiosas, laicos y laicas, de expertos y expertas- participaron del 28 de marzo al 2 de abril en Lima, Perú, del IV Simposio de Teología India, que con el lema “El sueño de Dios en la creación humana y en el cosmos”, organizó el Departamento de Cultura y Educación del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM). En tanto, el tema general que se desarrolló fue “Teología de la creación en la fe católica y en los mitos, ritos y símbolos de los pueblos originarios cristianos en América Latina”. Las deliberaciones fueron presididas por la Sección de Pueblos Originarios a cargo de monseñor Rodolfo Valenzuela, del Departamento de Cultura y Educación, que tiene como titular a monseñor Ricardo Ezzati, y de la Congregación para la Doctrina de la Fe, representada por su secretario, monseñor Luis Francisco Ladaria. Por la Argentina participaron monseñor Fernando Maletti, obispo de San Carlos de Bariloche y presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Aborigen; y el presbítero Ponciano Acosta. En el mensaje final se destaca que “durante estos días hemos podido descubrir las ‘Semillas del Verbo’ en algunos relatos cosmogónicos de los pueblos originarios, a la luz de la Palabra de Dios y el Magisterio de la Iglesia, para fortalecer una evangelización inculturada desde el espíritu de Aparecida y colaborar en la salvaguarda de nuestra hermana madre tierra y del planeta”. Tras señalarse “la Iglesia occidental hasta el Vaticano II actuó desde un cristianismo con perspectiva eurocéntrica; ahora se abre a la valoración de las diversidades”, se subraya que “la Iglesia ha de ser una comunidad inserta en la realidad, historia y cultura de los pueblos. Esta comunidad se articula con otras comunidades eclesiales en la Iglesia universal enriquecida con la tradición apostólica y la experiencia de los pueblos originarios”. “La vuelta a las fuentes y la apertura a las experiencias históricas de los pueblos nos renuevan. Para evangelizar y ser evangelizada la Iglesia dialoga, en búsqueda de nuevos horizontes de vida desde los valores y visión del mundo de los pueblos indígenas”, se asegura. Asimismo, se indicó que “el aporte de los pueblos indígenas es situar a la humanidad como parte de la naturaleza y a Dios presente y cercano que vela por la vida de la hermana Madre Tierra. Los participantes delinearon además criterios teológicos pastorales fundamentados en la frase “lo que no se asume, no se redime” de San Gregorio Nazianceno. A saber: Cristo está presente en todas las culturas. Al igual que Jesús expresarnos en parábolas que alientan vida. Hablar conociendo el corazón de la cultura de los pueblos originarios y en solidaridad con ellos. Los auténticos protagonistas de la inculturación son los pueblos originarios, con sus líderes espirituales, como verdaderos discípulos de Jesucristo, tienen un papel activo en su comunidad y los agentes de pastoral deben comprometerse con sus proyectos de vida. Valorar los aportes de la teología india. En las casas de formación y en los seminarios dar a conocer los mitos y las cosmovisiones de los pueblos y ofrecer teologías adecuadas para su comprensión. Avanzar en una cristología pascual pneumática y cósmica. Descolonizar los modos de pensar, saber y sentir de los agentes de pastoral para impulsar una verdadera conversión (cfr Aparecida, 96). Este es el camino para que, en Cristo nuestros pueblos tengan vida en plenitud. Dialogar y articular procesos eclesiales con movimientos indígenas. Asumir la diversidad que, desde los orígenes, es querida por Dios y no es un invento humano. La belleza y la sabiduría de Dios se manifiestan tanto en la diversidad cultural de la vida de los pueblos, como en la biodiversidad. El Simposio concluyó con una misa en la capilla de Santa María de la O, de Lima, presidida por el nuncio apostólico, monseñor Bruno Musaró.+